COMUNICADO GREMIALES LECHERAS
17 de mayo de 2017Charlas, ferias y visitas en Jornada de Puertas Abiertas en la EEMAC
17 de mayo de 2017Unas doscientas personas, entre técnicos, productores, agrónomos, veterinarios y estudiantes, se presentaron en la Estación Experimental “Dr. Mario A. Cassinoni” (EEMAC)” de Facultad de Agronomía para participar de la Jornada Anual de Lechería. Durante la actividad, titulada “Desafiando la eficiencia en sistemas pastoriles”, el Grupo de Lechería de la estación dio a conocer los avances en investigación dentro del sector, que desarrolla desde hace un cuarto de siglo.
Difusión de resultados
En esta oportunidad se compartieron los resultados de tres experimentos sobre pastoreo: Efecto de la estrategia de alimentación durante los primeros 180 días post parto sobre performance productiva en vacas paridas en primavera; Eficiencia de cosecha de forraje de vacas multíparas y primíparas y Estrategias de alimentación – resultados productivos y eficiencia energética. Respecto de los objetivos, en el primero se procuró determinar la respuesta productiva de vacas lecheras paridas en primavera alimentadas con diferentes combinaciones de DTM, DPM y pastoreo. La finalidad que se persiguió en el segundo de los trabajos fue evaluar el efecto de la paridad (multíparas vs primíparas) en el patrón de consumo y comportamiento ingestivo en la primera sesión de pastoreo de avena. Mediante el último experimento se intentó cuantificar la respuesta productiva (producción, composición, peso vivo y condición corporal) y los componentes del balance energético en la lactancia completa y distintos momentos de la misma, en vacas de parto de primavera con diferentes estrategias de alimentación (Estabuladas vs. Pastoreo+Suplemento), para las condiciones de producción de nuestro país.
Uno de los responsables de la jornada, el Ing. Agr. (MSc) Diego A. Mattiauda, señaló que ha quedado demostrado que el costo de producción de Uruguay hace que sea muy competitiva la lechería uruguaya a nivel internacional por el uso de forraje. A esto agregó que dentro de Uruguay, al comparar sistemas de producción, los que utilizan mejor la pastura producida en el predio –independientemente de cómo se cosecha- tienen mejores resultados económicos y mejor relación de precios, incluso en las peores situaciones. Mattiauda admitió que el proceso de pastoreo es complejo y cree que es necesario conocer cuánto debe consumir un animal. Sobre este aspecto, la investigación del grupo no se ha detenido. Durante la jornada del 2016 se divulgaron algunos resultados primarios que dieron cuenta de los altos consumos por parte de los animales durante todo el día. “En determinado momento de la lactancia el animal come de 26 a 27 kilos de materia seca, lo cual es elevado para lo que manejamos en los predios comerciales, y aunque suene grosero, muchas veces seguimos trabajando con las vacas con hambre”, valoró el investigador.
El desafío es cómo hacer rendir el alimento, sobre todo cuando se permite que los animales coman más. Sobre este punto, el técnico señaló que en la medida en que el productor pueda hacerlo en pastoreo “será un costo mucho más bajo que si lo hace con animales estabulados”. Un segundo elemento relevante para Mattiauda es evitar que el animal gaste energía en situaciones que pueden resolverse con infraestructura, condiciones de pastoreo o buena caminería (calor, humedad, lluvias, barro, etcétera). Con base en trabajos desarrollados en la EEMAC, afirmó que si al animal se le brinda las condiciones de pastoreo suficiente, “el costo extra del animal por ir a algunos potreros a pastorear no es tanto más alto de lo que podría significar el costo de mantenimiento de un animal estabulado”; la diferencia oscila, estimó, entre un “10 y un 15 por ciento”. Desde hace muchos años el Grupo de Lechería considera que el modelo de producción en Uruguay debe basarse, en términos generales, en la producción de forraje. “Para que esto ocurra, debe mejorarse la posibilidad de instalar, manejar y convertir su producción en leche de pasturas perennes, sean gramíneas o leguminosas”, indicó el otro responsable de la Jornada de Lechería de la EEMAC, Ing. Agr. (PhD) Pablo Chilibroste. Teniendo en cuenta las particularidades de tipo climáticas propias de esta región del país, desde hace mucho los investigadores apuestan a la festuca como gramínea perenne, pese a que no es la especie preferida por las vacas. Ocurre, explicó el docente, que ofrece muy buenas condiciones de instalación, de persistencia y productividad. Los desafíos que implica trabajar con esta gramínea radican en determinar cuáles son los esquemas de manejo que posibilitan un mejor compromiso entre producción de forraje, persistencia, consumo por parte de los animales y transformación en leche. Es así que todos los trabajos llevados adelante en los últimos años han estado orientados a hacer frente a ese reto. Más allá de no haberse apartado del pastoreo como un proceso central, en el entendido de que “en Uruguay los sistemas son y continuarán siendo de base pastoril”, tampoco se ha dejado de estudiar la interacción con los insumos, especialmente los suplementos, señaló Chilibroste. Justamente es en esa área donde el docente considera que la investigación del grupo ha contribuido más significativamente. “Vemos niveles de adopción importantes, productores y técnicos que manejan los conceptos que se generan aquí, con estrategias de manejo de pastoreo, con pastoreo restringido, manejo de lo que le sucede al animal antes de ir a pastorear y la interacción con la suplementación”, comentó.
Nuevo experimento
El ensayo en desarrollo que fue presentado procura identificar los efectos resultantes de tres intensidades de defoliación de festuca sobre tasa de crecimiento, heterogeneidad, distribución y persistencia de la pastura, por un lado, y tasa de consumo, comportamiento ingestivo y rendimiento en leche de vacas de partos de otoño, por otro. Consta de cuatro bloques espaciales con tres tratamientos en cada uno (laxo, medio y control), según la altura remanente. Cada parcela tiene 0,2 hectáreas de superficie y es pastoreada por tres vacas de partos de otoño 2017. Estos criterios se mantienen fijos durante todo el año, mientras que los días de ocupación de la parcela
varían según cada tratamiento. Se medirá la producción de leche en distintas estaciones (otoño-invierno con suplementación y primavera solo a pasto) y se estudiará la festuca sin suplementación para ver hasta dónde resiste, comentó Pablo Chilibroste. También interesa conocer, al igual que en otros trabajos y en términos de persistencia, “qué consecuencias tiene este manejo en la performance de la festuca el año próximo y ver qué tan temprano aparece en el siguiente otoño y con qué características”, finalizó. Tambo y unidad de alimentación En la estación agronómica de Paysandú se está llevando adelante la construcción de un tambo y una unidad de alimentación controlada, intervención edilicia que es parte del proyecto de la Red Tecnológica Sectorial (RTS) “Sistemas de producción de leche competitivos, sostenibles y simples: el desafío de la lechería uruguaya”. Éste procura contribuir en la mejora de la investigación en lechería. Durante la mañana se visitó el lugar y se constató el avance de obra. Una vez culminada la edificación, las nuevas instalaciones constituirán un espacio de investigación multidisciplinario de última generación que albergará las actividades planteadas por la RTS y aquellas que surjan del Centro Universitario Regional Litoral Norte. Traspasar la región Habiendo recorrido 25 años de investigación en lechería, Chilibroste señaló que comprendieron que debían trascender los límites de la EEMAC y de esta región. Es así que actualmente están involucrados en proyectos muy importantes como la RTS y como el CRI Lechero del Litoral, antes. “Se trata de una articulación más permanente entre la academia, la industria, el sector más productivo, mirar más la cadena en su conjunto”. Para el docente, asumir tales retos significa una “lección aprendida” y una “cosecha de todo el camino recorrido”, que permitió generar confianza entre los actores e involucrarse junto a la industria y a los productores, en proyectos ambiciosos con desafíos en los distintos eslabones de toda la cadena láctea y en la producción de forraje y
leche, la salud, la reproducción y el balance ambiental. Estos procesos y la interacción entre actores propios del sector contribuyen a construir una mirada integral y que incluye considerar el Uruguay exportador, la realidad de la lechería en el país y el desafío de que sea competitiva a nivel internacional, además de que pueda soportar vaivenes de precios y la variabilidad climática y de mercado, componentes de una realidad constante para los sistemas uruguayos, finalizó.