Abrieron las inscripciones para participar en el «Proyecto de relevamiento y difusión de mejoras en la terminación de vacunos»
19 de abril de 2017Solicitud de caravanas de trazabilidad para terneros
19 de abril de 2017Por Humberto Sorio
El pionero proyecto de pastoreo racional fuera de Francia fue implantado hace 54 años en La Conquista, Bagé, estado Rio Grande do Sul, por Nilo Romero (1922-2014). Desde entonces fueron miles y miles de visitantes de todo el mundo. El sistema creado por el productor-profesor normando ha salido del ambiente subtropical del sur de Brasil para conquistar espacio e importancia en las disímiles condiciones de clima y suelo en todos los países del continente, sin excepción. En las zonas tropicales y subecuatoriales esta expansión se procesó de forma particularmente acelerada para bovinos, búfalos, caprinos y ovinos. Algunos países lo han reconocido en programas oficiales como tecnología idónea para mejorar la vida de los ganaderos y también para mitigar los gases de efecto invernadero, tema relevante en estos tiempos de calentamiento global. Estaciones experimentales pasaron a estudiar y perfeccionar los sistemas de pastoreo, el más decisivo factor de aumento de productividad en la ganadería, con casi inmediatos resultados positivos junto a los productores.
Los orientales, por la vecindad y facilidad de llegada, están entre los que más han firmado el libro de presencias de La Conquista. No es menos verdad, fueron los que con más lentitud han adherido a la idea de implantarlo en larga escala, a despecho del extraordinario potencial productivo de sus campos, constituidos de centenares de especies forrajeras autóctonas de elevado valor nutritivo. Con satisfacción veo que todo ha cambiado en la ganadería uruguaya. Hosanna! El Pastoreo Voisin galopa a riendas sueltas por todos los departamentos.
Osados emprendedores, con permanente acompañamiento técnico, eficiente administración, capacitación del personal operativo y planificación alimentaria basada en pasturas, han alcanzado expresivos incrementos en la carga animal y sus establecimientos ya producen 200 kg de peso vivo por hectárea y siguen progresando.
Los campos naturales históricamente componen la mayor parte del territorio uruguayo, aunque en los últimos 20 años la agricultura de granos y los bosques de eucaliptos se les han suprimido extensas áreas en las zonas de suelos más fértiles y de mejor topografía para la mecanización. Los de basalto ocupan 4 millones de hectáreas (1,5 superficiales) que, en virtud de la imposibilidad de ser arados, serán para siempre conservados como pasturas, su más expresiva vocación económica y ecológica. Es total contrasentido que se les condenen ad aeternum a estos ricos campos a incrementos anuales de peso vivo que raramente sobrepasan los 80kg/ha. ¿Podemos imaginar, sin darnos a complicados cálculos matemáticos, la repercusión en la economía uruguaya como un todo si estos campos pudiesen producir un promedio de tan solamente 120kg/ha? En las zonas de suelos más fértiles, los de altos índices CONEAT, la ganadería en pastoreo Voisin no se achica en rentabilidad comparada a la cultura de soja y aún se logra mayor estabilidad económica en mediano o largo plazo delante las vicisitudes de la meteorología. En estos campos la meta no puede ser menor que 300kg y no es el techo. En breve estos números estarán disponibles.
Para la implantación de un proyecto de pastoreo Voisin son requeridas inversiones en cercas eléctricas para subdivisiones de potreros y muy bien planeado sistema de abastecimiento de agua, servida en bebederos dispuestos en las áreas sociales dotadas de árboles de sombra, adonde los animales son conducidos en las horas más calientes del día. De esta manera se les propicia confort térmico y se evita que la energía necesaria para producir sea malbaratada en poco eficaces esfuerzos fisiológicos para disipar la carga calórica acumulada. El agua es el factor que más rápidamente influye sobre el desempeño animal y se merece atención especial y constante. Aun así, no es indispensable que esté disponible en todos los potreros, los animales solo esporádicamente se aventuran a tomar agua fuera del horario comprendido entre 10 y 15 horas, 17h en los días más calurosos. Además de innecesaria del punto de vista técnico, la alta inversión requerida para satisfacer este rubro ha desestimulado a muchos ganaderos a que montaran sus proyectos en las Américas. Firmeza en los principios, flexibilidad en la práctica, es una buena recomendación.
El verano pasado puede ser considerado uno de los mejores en los últimos 50 años en Uruguay. Hay hacienda gorda y pasto abundante por todas partes, incluso en los campos aún explotados extensivamente. En los campos sistematizados en pastoreo racional la disponibilidad forrajera es también imponente, por supuesto. No será siempre así. Habrá adversidades climáticas y los pastos no crecerán con tanto vigor en todas las estaciones del año. Es sabido que dos tercios de la producción de materia seca de los campos sometidos a pastoreos continuos se concentran en la primavera y el otoño. En los campos subdivididos en gran número de potreros y manejados con la observancia de tiempos correctos de descanso y ocupación, la curva de crecimiento de las plantas no presenta diferencias tan acentuadas y los efectos de los eventos climáticos desfavorables no son tan inmediatos y devastadores como se verifica en los sistemas convencionales. No agredidas en su fisiología, estas plantas tienen raíces finas y profundas, ocupan mayor volumen de suelo, absorben más agua y nutrientes y, en consecuencia, producen mayores cantidades de masa verde que van alimentar a un mayor número de animales. En otras palabras, el campo pasa a contar con dos pisos.
Los campos naturales de Uruguay son un verdadero patrimonio biológico de la humanidad. Utilizarlos de modo intensivo y racional es el verdadero camino para su desarrollo económico y social y el pastoreo Voisin es la herramienta más eficaz para logralo.