De no ser por el tipo de cambio el panorama hubiese sido otro, como sucedió con la cotización del indicador expresado en su moneda local.

Esta semana una de las tres regiones donde se comercializa la lana en Australia, la del Sur, en Melbourne, ajustó a la baja y esto determinó que expresado en su moneda local el IME retroceda A$ 12 centavos (-0,8 %) en relación al cierre de la semana pasada, mostrando así un saldo semanal desfavorable, a A$ 15,22 por kilo base limpia.

De todas maneras el promedio que registra a lo largo de la zafra el indicador expresado en su moneda local es de A$ 13,91 y muestra una valorización de 17,3 % desde que comenzó la actual campaña hasta el momento.

Por su parte, en dólares estadounidenses el promedio que registra es de US$ 10,53 y también muestra una valorización desde que comenzó la zafra de casi 18 %.

Esto demuestra lo estructural de la fortaleza y la suba del indicador, ya sea en su moneda local como expresado en dólares estadounidenses, que es lo que hay que destacar. Más allá de que, como esta semana, hay factores que juegan su papel semana a semana, como el tipo de cambio.

El dólar estadounidense no logró recuperarse luego de las presiones que recibió por las tensiones en la administración Trump y esto fue aprovechado por el mercado que jugó a favor para un lado y en contra para el otro.

Por otra parte y pese a que esta semana la oferta se redujo frente a siete días atrás, el volumen colocado fue mayor. De los poco más de 35.00 fardos que se ofertaron se logró vender el 91 % (32.125), lo que representa una mejora de casi 1 %  en relación a una semana antes.

Tardáguila Agromercados.