Por Martín Ferreira Pinto

Destacada dispersión y valores firmes en la Agropecuaria de Salto; remataron Correa & San Román y Zambrano & Cía.

Con una pista encendida y el respaldo de compradores de todo el país, la cabaña Bayucuá, de la familia Mattos, volvió a confirmar por qué es un sello de referencia en la genética Angus uruguaya. En su tradicional remate anual, realizado en la Agropecuaria de Salto, se dispersó la totalidad de la oferta, 70 toros y 100 hembras, en una venta ágil y con valores que reflejaron la calidad de los ejemplares.

El promedio general de los toros fue de US$ 6.343, con un destaque especial para los 41 ejemplares de pedigree, que promediaron US$ 7.376. Entre ellos, los tres toros planteleros alcanzaron precios superlativos, con un promedio de US$ 14.800.

El máximo valor del día fue de US$ 19.200 por “Regente” adquirido por Rodolfo Dolz. Le siguieron “Tolón” vendido en US$ 13.200 a Fernando Knecht, y “Aspen” adquirido por Peña Soc. Gan. en US$ 12.000.

También se destacó la venta de tres toros planteleros de campo, con un promedio de US$ 12.200, encabezados por el RP 10770 vendido en US$ 13.200 a Rodolfo Dolz.

Los 6 toros PI de tres años recomendados promediaron US$ 8.740, con precios entre US$ 10.800 y 7.200. En tanto, los 29 toros PI de tres años se ubicaron entre US$ 9.600 y 4.800, con un promedio de US$ 5.826.

Los 14 toros PC de campo de tres años hicieron US$ 5.066 de promedio, y los 15 toros SA de tres años, US$ 4.712, completando así los 70 toros ofertados y vendidos.

Un dato relevante fue la dispersión de la genética, con ventas hacia 45 criadores diferentes, lo que reafirma la confianza del mercado en la propuesta de Bayucuá.

Pero la tarde no solo fue de toros. Como es tradicional, la cabaña también ofreció parte de su selecto plantel de vientres, logrando resultados destacados. Las 17 hembras PI promediaron US$ 3.861, con el 50% de “Colona” vendida en US$ 7.200 a cabaña Los Tapiales.

Entre las planteleras, “Josefa” fue adquirida por La Magdalena en US$ 6.000, mientras que «Angélica» y «Angelita» se vendieron a US$ 4.200 cada una. Las 13 vacas PI preñadas para otoño promediaron US$ 2.834, con máximos de US$ 4.440.

La oferta total de vientres se concretó con 85 vacas SA preñadas, que se vendieron de un martillazo a US$ 1.920 cada una a Fernando Knecht.

En una tarde primaveral y bajo una excelente dinámica comercial, Bayucuá volvió a demostrar su vigencia y prestigio en el Angus nacional: todo se vendió, rápido y bien.

Al finalizar, María Mattos, principal de la cabaña, expresó su satisfacción y gratitud: “Muy contentos, sobre todo, y siempre lo destaco, por nuestros clientes. Me alegra mucho ver tanta gente acompañando, porque esa confianza es lo que más nos motiva. Tenemos compradores de toda la vida, y ver que siguen viniendo, que confían, que vuelven a elegirnos, es un honor enorme. Este año fueron 45 compradores distintos, muchos que llevan unos pocos toros cada uno, y eso habla de una relación de largo tiempo y de trabajo compartido”.

Y agregó: “También agradezco a las cabañas y criadores nuevos que se animan a probar nuestra genética. Con suerte no, con mucho trabajo, buscamos que confíen en nosotros y se queden. Estoy muy agradecida por la valoración que el mercado hace de nuestro esfuerzo y del trabajo de todo el equipo de Bayucuá”.

¡Felicitaciones!