Este miércoles, Donald Trump estableció un arancel universal del 10% por encima de los ya vigentes y una tasa recíproca para compensar los gravámenes que otros mercados imponen a bienes de Estados Unidos. Las represalias podrían generar una escalada que recuerda a la década del ’30, que llevó a una de las peores recesiones globales.
Ayer, finalmente y luego de una larga espera llena de especulaciones, llegó el denominado Día de Liberación, según denominación del gobierno estadounidense.
El presidente Trump anunció nuevos aranceles de importación que apuntan a fortalecer la declinante industria americana, debida a la competencia desleal de otros países en su visión.
Según detalló el Lic. Miguel Gorelik, Director de Valor Carne en una síntesis «muy apretada», estableció un arancel universal del 10% por encima de los aranceles actuales y además aplicó un arancel recíproco que se propone compensar aranceles de otros países sobre bienes de EE.UU., el manejo de sus políticas cambiarias y hasta la manera en que controlan corrientes de migración o drogas ilegales para evitar que entren en su país.
A modo de ejemplo, los aranceles sobre contrapartes muy relevantes son: 34% para China, que se suma al 20% aplicado recientemente; 20% para la Unión Europea; y 24% para Japón.
En los casos de Canadá y México, vecinos y principales proveedores y clientes, ya les había impuesto aranceles sobre ciertos productos. Ahora dice que los bienes que cumplan con el acuerdo comercial que tienen los tres países desde hace 30 años seguirán entrando como siempre, pero los que no lo hagan, pagarán un 25% más. No queda claro si el ganado y la carne quedan exentos o no.
Los aranceles adicionales más altos se reservaron para países asiáticos, tales como Camboya 49% (es el más alto de todos), Vietnam 46%, Taiwán 32%, India 26%, Corea del Sur 25%, etc etc.
Los miembros del Mercosur tendrán el arancel adicional base de 10 puntos.
Una curiosidad es que con el detallado listado de 185 países, Ucrania recibió 10 puntos adicionales y Rusia no está mencionada.
En la misma orden ejecutiva, la primera decisión fue la de declarar la emergencia nacional a causa de los crecientes y sostenidos déficit comerciales.Tanto China como la UE anunciaron que tomarán las medidas necesarias para defender a sus empresas y mercados; Japón declaró su pesar por la medida anunciada.
Ahora, el arancel promedio ponderado de los EE.UU. será de alrededor de 24% cuando hasta hace 24 horas era de 2%.
Es difícil prever la escalada a que puede conducir esta decisión y su impacto en el comercio mundial y en el estado de las economías.
Irremediablemente, nos hace acordar al tipo de medidas que se fueron contagiando en la década de los ’30, tras la crisis económica de 1929, y que llevaron a una de las peores recesiones globales.
Las ventas de carne del Mercosur a EE.UU. no quedarán particularmente afectadas. Todos sus miembros recibieron el mismo tratamiento así como sus principales competidores, Australia y Nueva Zelandia, con las dudas expresadas arriba sobre la situación de México y Canadá.
Recibirán alguna presión de sus clientes pero que no tendrá un gran efecto. El riesgo viene por el lado de que el precio interno en ese país sea mayor y afecte la demanda, pero se da un momento en que la misma es muy fuerte y los valores muy altos.
En tanto, habrá que seguir con el curso de los negocios de todos los días mientras va aclarando el panorama, concluyó Gorelik.