Con el cierre sin cambios de este lunes los futuros de soja lograron cerrar octubre con un avance punta a punta de algo más de 5% gracias a una demanda firme que compensó el ingreso de una cosecha récord estadounidense. El contrato julio cerró estable en US$ 377,9 por tonelada ganando 5,2% en el mes. Este lunes el reporte semanal de embarques de la soja volvió a superar las expectativas lo que dio firmeza el mercado a pesar del buen clima para la cosecha estadounidense y la debilidad en el precio del petróleo. Al cierre del mercado el USDA informó que hasta el domingo se había cosechado el 87% del área de soja frente al 91% de igual fecha del ciclo anterior y el 85% del promedio de cinco años. El dato estuvo en línea con lo estimado por los analistas consultados por Reuters.  El mercado se enfocará la semana que viene en el reporte de oferta y demanda del USDA que podría volver a elevar la proyección de producción.

Mientras en Brasil la siembra viene adelantada, en Argentina y Uruguay recién comienza a tomar fuerza retrasada por los últimos episodios de lluvias. El miércoles pasado la Bolsa de Comercio de Rosario indicó que en la llamada zona núcleo se había sembrado el 2% del área prevista de soja frente al 10% de un año atrás. Hay zonas puntuales en el noroeste de Buenos Aires así como partes de La Pampa y del Sur de Córdoba que recibieron muy altos registros de lluvias por lo que se tendrá que esperar a que baje el agua y se pueda entrar. En Uruguay se avanzó con la siembra en los últimos días aunque, en general, los productores han sido cautos debido a los pronósticos de lluvias, lo que se consolidó en las últimas horas ante las advertencias por tormentas muy intensas.

Entre las grandes empresas no se tiene margen para demorar la implantación para luego poder cumplir con la intención de siembra en un año de incremento en la superficie de soja de primera.

En términos de volumen se afianza la percepción que hay semillas para cumplir con la intención de siembra que podría ser marginalmente inferior a la campaña anterior. Hay sin embargo, cautela por lotes que están muy justos en cuanto a los niveles de calidad a lo que se suma la oferta de ciclos que habitualmente no se siembran localmente.

A diferencia de la siembra, en Argentina y Uruguay las ventas a futuro de soja están adelantadas respecto a un año atrás –cuando los precios eran sustancialmente inferiores- mientras que en Brasil la comercialización está retrasada. En ese país la baja del dólar lleva a precios en reales que no son atractivos para los agricultores.

La semana pasada se llegó a valores para la soja nueva que llegaron puntualmente a US$ 370 por tonelada base acopio aunque no se pudieron mantener el viernes que terminaron entre US$ 365-US$ 367 por tonelada al igual que este lunes. Por efecto de la suba en Chicago y la escasa demanda externa se dio en Argentina y Uruguay un aumento en el descuento entre el valor local y el futuro de referencia en el mercado estadounidense. Si bien se dieron negocios, no hubo un empuje relevante en la comercialización por parte de los productores. En algunos casos –con ventas ya comprometidas- se quiso esperar hasta avanzar en la siembra mientras que en otros casos se apuesta a valores más altos.

En Argentina, según la Bolsa de Comercio de Rosario hubo una fuerte comercialización de soja la semana pasada gracias al incremento en los precios. En el informe semanal se indicó que “lo más picante del mercado probablemente pase por la soja nueva”.” Con 3 millones de toneladas ya compradas por el sector industrial y exportador, ello constituye el mayor volumen negociado tan anticipadamente en los últimos cuatro años”, resaltaron los técnicos de la entidad.

Blasina y Asociados.