Mercado lanero

En la segunda semana de remates (12-16/8)luego del receso anual, el indicador continúa en la senda de pérdida de valor. Finalizó la semana pasada ubicado en U$S 10,26 por kilo base limpia lo que implica que durante los dos días de remates disminuyó un 10% en dólares americanos. Con una oferta de 37.372 fardos y a pesar de la noticia de suspensión de remates en Sudáfrica, no se logró revertir la situación y los precios disminuyeron. Como incidencia de la fuerte baja de precios, aumentó al 35 % la tasa de lotes que no se vendieron al no lograr el precio pretendido (generalmente la demanda se ubica por encima del 90% de lo ofertado). En términos porcentuales esta baja es de las mayores desde 2008 y el indicador finaliza en niveles similares a octubre 2016 (en dólares americanos). Cuando comparamos estos valores con los de un año atrás, se observan ajustes en todos los indicadores.

Varios analistas australianos explican esta fuerte corrección de los valores de la lana a partir de la incertidumbre global comercial y del enlentecimiento de la economía mundial. Todas las categorías disminuyeron sus precios entre un 16% (28 y 30 micras) y un 6% (16.5, 18 y 18.5 micras). Este es un escenario muy diferente al que se registraba un año atrás donde los valores alcanzaban niveles record. Al igual que la semana pasada, los exportadores en Australia indicaron la imposibilidad de compra a pesar de los ajustes y de la menor oferta. La confianza del consumidor y principalmente de los industriales continúa “temerosa” ante las diferentes señales que se generan en el mercado. Las monedas también registraron volatilidades durante la semana.

Esta semana se estiman 33.696 fardos distribuidos en dos días de remates.

En nuestro país hace semanas no se realizan negocios ni se manejan referencias de precios como consecuencia de lo ocurrido en el exterior; mientras tanto, transcurren las esquilas, principalmente las preparto en ovejas de cría.