En Salto, a 16 kilómetros de la ciudad, con ventas a cargo del escritorio Ruben F. Cánepa se llevó adelante el 51º remate anual de cabaña San Gregorio de la flia. Tellería el pasado sábado por la tarde en la propia estancia.
Muchísima cantidad de público se hizo presente entre clientes y amigos que acompañaron la jornada para hacerse de prácticamente la totalidad de los Hereford y Polled Hereford ya que solamente un animal quedo sin comercializarse despachándose la misma para los departamentos de Salto , Artigas, Paysandú, Tacuarembó, Soriano y Durazno.
La oferta presentada fue muy estacada con una muy buena preparación comenzando con la venta de los toros alternando los mochos que en total fueron 10 con los astados que en su totalidad fueron 38.
En cuanto a los valores, el destaque de la jornada lo consiguió un astado en U$S 6.200 adquirido por Omar Urioste, el valor mínimo fue de U$S 2.500 y el promedio para los 47 toros vendidos fue de U$S 3.281.
Los 10 toros mochos hicieron un valor máximo de U$S 4.700, un mínimo de U$S 2.600 y un promedio de U$S 3.315. Para los 37 toros astados el valor máximo fue de U$S 6.200 y un mínimo de U$S 2.50o con un promedio de U$S 3.271.
Finalizando las ventas se comercializaron cuatro lotes de vaquillonas HS y H con valores de U$S 1.200 máximo, U$S 655 mínimo y U$S 859 de promedio.
UN REMATE PRUDENTE EN CUANTO A VALORES Y PRECIOS
Así lo señalo el martillero Francisco A. Cánepa quien además agregó que había toros muy de destaque y toros más inferiores muy prudentes que consiguieron «precios razonables».
Así mismo destaco que «fue un año para los compradores, hubo toros de 2.500, 2.800 y 3.000 dólares, fue ese el mercado que se armó, por suerte Tellería nos deja vender, siempre abre la cancha, pero fue marchando, hubo compradores de volumen, y la oferta se fue despachando».
PLENAMENTE CONFORME
Por su parte Gregorio Tellería, integrante de la cabaña, así se demostró al finalizar las ventas. «teníamos temor de que no anduviera muy bien, siempre sucede que cuando los precios de la zafra son altos, hay gente que aprovecha las oportunidades que en todos los remates hay para hacerse de lo que necesita».
«Este remate salió muy bien, nosotros no esperábamos más, sabemos que tenemos una torada astada, que no hay muchos clientes, muchos se han ido al mocho y por eso la presencia de los toros mochos en la pista de San Gregorio. De todas maneras tenemos nuestros clientes viejos, y algunos nuevos de toros astados, que fueron los que nos defendieron, por lo que estamos muy conformes» destacó.