Chile goza de dos condiciones que lo posicionan en el mercado internacional: es libre de aftosa sin vacunación y cuenta con un amplio abanico de tratados de libre comercio, entre ellos con el país asiático.

Rubilar explicó que el mercado de Japón es básicamente de menudencias y entre estas la principal es la lengua. Hoy en día se vende a US$ 10-11 el kilo, un valor alto que ayuda a la integración de las menudencias. Otros mercados pagan este producto en el entorno de los US$ 6. Otra cosa a tener en cuenta es que Japón es un mercado en el que hay que tener mucho cuidado en los detalles. «Hay que ser muy prolijo en las especificaciones que se requieren. Es un mercado que hay que desarrollar con cautela», expresó.

El empresario chileno, presente en la feria de Sial en Shanghái, dijo que China es un mercado importante para Chile porque posibilitó la venta de tipificaciones de carcasa que anteriormente no eran comercializables o no tenían precio. «Ahora, con la apertura de China, las carcasas tipificadas con la letra U, que son de vacas o de animales adultos, han podido ser colocadas en el mercado», explicó. Eso ha provocado un arrastre de precio hacia arriba para las demás categorías.

La ganadería en Chile pasa por un momento complejo porque la masa ganadera se redujo en alrededor de un millón de cabezas, a unos 2,4 millones, lo cual complota contra todos los tratados de libre comercio que tiene el país. «No podemos abastecer los mercados que tenemos abiertos en la actualidad», aseguró el empresario. A eso hay que agregarle la condiciones sanitarias que tiene Chile, de libre de aftosa sin vacunación, que le permite exportar ganado en pie tanto de origen lechero como terneros para crianza, fundamentalmente vaquillonas lecheras a China y Colombia y terneros a Turquía.

Chile importa actualmente alrededor de 60% de la carne vacuna que consume. Según Rubilar, dado que el costo de la ganadería chilena es superior al del resto del Mercosur, «somos, por déficit y por condiciones de precio, importadores netos». Consideró que esto no va a cambiar y que Chile seguirá siendo un creciente importador de carne vacuna. Pero además, en la medida que el país transandino logre ampliar su capacidad exportadora, tendrá necesidades de crecientes volúmenes de importación para abastecer la demanda local.

El empresario dijo que el precio de un ternero en Chile es del entorno de $ chilenos 1.350, unos US$ 2,80 el kilo en pie. Es un costo de la reposición alto en relación a la cotización a la que se vende el novillo. Por lo tanto, el ganadero termina los novillos más pesados, se prefiere agregarle más kilos para compensar los altos costos de la reposición.

Tardáguila Agromercados.