Argentina continúa liderando el valor de la región, pese a que en los últimos siete días, el novillo pesado y trazado vale 3,97 dólares, de acuerdo al tipo de cambio usado por los exportadores, diez centavos menos que en la semana anterior. Según Valor Carne, pese a la nueva caída en la cotización del dólar en los mercados financieros, en los que los frigoríficos pueden vender el 20% de sus divisas, los casi A$100 que bajaron los ofrecimientos de las plantas permitieron este alto en el camino de la fuerte valorización que tuvo esa categoría. Aunque la oferta sigue restringida, la demanda ha aflojado a causa del deficitario negocio actual de la exportación, con plantas que disminuyeron el volumen de hacienda con ese destino y otras que paran algunos días de la semana.
Nuestro país continúa en segunda posición, el novillo tipo exportación cotiza a 3,66 dólares, sin cambios en la semana. Hay menor concreción de operación según los consignatarios. La faena de la semana fue de 38 mil cabezas, 22% menos que en la previa y 16% abajo del promedio de las diez precedentes. El ritmo de embarques de los primeros días de mes va a la mitad de marzo anterior.
En Paraguay, el novillo apto UE tiene un valor de 3,35 dólares, también sin cambios. La menor oferta, a causa de la campaña de vacunación, no ha provocado una mayor presión de los frigoríficos que también enfrentan mercados flacos, mientras que en Brasil, el novillo gordo se paga 3,18 dólares, un centavo menos en la semana, con una mínima baja en su precio en reales y sin modificación en el tipo de cambio. El arranque del mes mostró embarques de cierto nivel, que proyectan 170 mil t para marzo, lo que marcaría el menor número mensual desde julio.
Extra región, en EE.UU. hubo un aumento de 7 centavos en la semana, ubicando al novillo en los 6,48 dólares, lo que lo pone a sólo 13 centavos debajo de su récord nominal histórico, observado en junio.En Europa el novillo cotiza a 5,73 dólares por kilo carcasa, aumentando un centavo en la semana, resultado de una muy pequeña caída en su precio doméstico que fue más que compensado por la valorización del euro.