Se llevó adelante el viernes pasado en la sede de la Asociación agropecuaria de Salto, la jornada sobre el efectivo control de garrapata, en tal ocasión, la Ing. Agr. Alda Rodríguez de Bio Uruguay, disertó sobre el Control biológico de garrapata con hongos patogénicos, por tal motivo, en diálogo con ACTUALIDAD AGROPECUARIA expresó que el mismo es un manejo más que un control, porque se extraen organismos que son patógenos de la garrapata, de los mismos establecimientos, de los ecosistemas naturales y se los reproduce para volver a insertarlos en el sistema y que ayuden a generar un control natural de la garrapata. “Eso va a permitir con el tiempo disminuir el uso de agroquímicos que todos sabemos los problemas que tienen de resistencia, de problemas con la salud humana y de la carne, con la contaminación de los recursos naturales. Esto es una alternativa que poquito a poco se tiene que ir desarrollando en el país porque estamos muy atrás en Uruguay con esto de utilizar nuestra biodiversidad natural para el control de plagas”expresó.
La Ing. Agr. Alda Rodríguez también comunico que otros países lo tienen muy desarrollado, en ese sentido dio como ejemplo Brasil, Colombia, México, Cuba donde hace años que vienen usando control biológico y reguladores naturales de la garrapata “y nosotros con un Uruguay natural todavía tenemos la chance de poder aislarlos” aclaro.

El Dr. Rafael Carriquiry técnico del Plan Agropecuario también expuso sobre “Alternativas para el control de garrapata”.
En tal sentido, comentó que el Plan Agropecuario forma parte de una comisión interinstitucional que llama a todas las instituciones vinculadas al tema; la Facultad de Veterinaria, el Ministerio de Ganadería, la Comisión Nacional de Salud Animal, la Cámara de Especialidades Veterinarias, el INIA.  Nos ponemos de acuerdo en un mensaje común, en las grandes líneas, en las cosas que son importantes que los productores y los técnicos tengan presentes a la hora de encarar el control de garrapata, comentó.
Rafael Carriquiry comentó que este mes de agosto es el fundamental para comenzar los tratamientos, ya que cuando hay muy pocas garrapatas el efecto del control es muy superior que cuando las poblaciones aumentan, a nivel personal, tiene la impresión que el cambio climático ha sido en los últimos tres años favorables para la garrapata, «si bien el año pasado hubo unas cuantas heladas, la falta de sequía de los veranos y los inviernos menos rigurosos han hecho que la población de garrapata en los refugios, la gran población de garrapatas que es la que está en el campo, no la que está arriba de los animales, haya aumentado muchísimo, se haya venido acumulando y esto hace que el control se haga cada vez más difícil», sentenció.
«Entiendo que los productores hasta ahora se veían apoyados en el control de garrapata cuando el clima era un poco más riguroso, con cierta sequía en el verano y con frío más importante en el invierno. Cuando el clima es más favorable para la garrapata, que también es más favorable para las pasturas, hace que el control sea más difícil, entonces ya no alcanza con ir a comprar un garrapaticida a la veterinaria, hoy por hoy es necesario establecer un plan de control previendo lo que va a pasar para adelante, lo que se va a hacer, presupuestando, estimando resultados y metas, evaluando lo que pasa en cada situación y ajustando el plan a cada establecimiento».

Nota completa con el Dr. Rafael Carriquiry en diálogo con ACTUALIDAD AGROPECUARIA.