Los granos estivales vieron compras de oportunidad, al haber tocado determinados niveles sensibles de precios, que los dejaron expuestos a la búsqueda de oportunidades en el mercado. Hasta el momento, ambos recuperaron la mitad de las pérdidas sufridas en el arranque de la presente semana.

Los pronósticos climáticos muestran condiciones más secas para los próximos días, en gran parte del Medio Oeste, siguiendo a las lluvias recientes allí caídas. De todas formas, dependerá del humor con el que se levante el mercado, como para definir si estos pronósticos puntuales se imponen, o algún otro, o incluso otras variables durante este mercado climático.

El maíz cerró arriba, si bien todavía se encuentra por debajo del cierre del viernes anterior, así como por debajo de los cierres promedio de referencia, sobre todo en los contratos de vencimiento más inmediato. Este jueves, las ventas de exportación semanal dieron un salto respecto a la anterior, duplicando el cierre de nuevos negocios frente a siete días atrás. La firmeza en el mercado de trigo seguramente también influyó sobre la evolución de precios del cereal de verano.

La soja vio buenas ganancias, recuperando cerca de la mitad de lo perdido durante la primera mitad de la semana. La posición de vencimiento noviembre se encuentra actualmente por encima de los cierres promedio de plazo más corto, encontrándose en terreno neutro respecto al indicador de comercialización del mercado. Las ventas de exportación semanal fueron inferiores a una semana atrás, lo cual no resultó sorpresivo para los operadores.

El trigo primaveral fue el que más subió, arrastrando consigo a los invernales, blando y duro de Chicago y Kansas respectivamente. La confirmación de rindes y calidades afectados por la falta de agua y altas temperaturas, durante el período crítico de llenado de grano, parecería empezar a prevalecer en el ánimo del mercado, viendo como esto se suma de arranque a la menor área total (invierno y primavera) sembrada con el cereal desde 1913.