La primera semana de la zafra 2017/2018 trajo escasas variaciones en materia de precio más allá del ajuste en el tipo de cambio. En el mercado local aparecen los primeros lotes de esquila preparto con referencias de precios para lanas gruesas y media por parte de los consignatarios. En negocios en el lomo por lana fina algunos operadores vieron un distanciamiento entre la punta compradora  y la vendedora.

Para la zafra 2017/2018 la bolsa australiana de lanas ajustó la ponderación para el cálculo del Indicador de Mercado del Este (IME). De esta manera, para el cierre de la campaña anterior lo ajustó de US$ 11,58 a US$ 11,68 por kilo y de AU$ 15,07 a US$ 15,25 por kilo en la divisa australiana.

Es así que el jueves el IME cerró en US$ 11,58 por kilo, con una caída semanal de 10 centavos o 0,9%. En la divisa local la baja fue de apenas un centavo en la semana a AU$ 15,24 por kilo con la moneda australiana cayendo casi 1% frente a la estadounidense.  De esa manera, el IME quedó 15,5% por encima de un año atrás en dólares australianos y 16,6% en dólares estadounidenses.

La oferta fue de 51.150 fardos con una comercialización en torno a 93%. Para esta semana se ofrecerían 43.348 fardos. Luego, habrá tres semanas de receso.

El Secretariado Uruguayo de la Lana indicó que el mercado interno continúa con poca fluidez de negocios. Se realizan operaciones de lana fina en el lomo y surgen algunos negocios puntuales de lotes grifa verde en lanas más gruesas. Se realizan también negocios con referencias entre US$ 2,20 y US$ 2,50 por lotes sin acondicionar de 28,5 micras y entre US$ 2,60 y US$ 3 por kilo para lotes de grifa celestre. Estos precios para lotes de lana gruesa coinciden con la Unión de Consignatarios y Rematadores de Lana que también reportó negocios para lanas finas y medias.

Zambrano & Cia indicó que en algunas zonas del país comenzaron a quedar prontos lotes de esquila pre parto de la zafra 2017/2018. “Como es habitual, los datos objetivos de algunos de esos lotes están mostrando altos rendimientos, tanto al lavado como al peinado. No obstante ello, aún no se tienen datos suficientes como saber cuál es el efecto año, si la lana está más gruesa o más fina que la cosecha anterior. Cabe recordar, que el año 2016 marcó en general un engrosamiento de la lana respecto a la cosecha del año anterior”.

Blasina y Asoc.